El PIB estadounidense creció a un ritmo anual del 4,9% en el tercer trimestre, mejor de lo esperado.
La economía estadounidense obtuvo un notable logro en el tercer trimestre de este año, con un crecimiento que superó las expectativas de muchos economistas y analistas. El producto interior bruto (PIB), medida de todos los bienes y servicios producidos en Estados Unidos, creció más deprisa de lo que muchos esperaban. Esta evolución parece ser el resultado de un fuerte comportamiento de los consumidores, aunque la economía aún se enfrenta a tipos de interés más altos, presiones inflacionistas y otros retos.
Según un informe del Departamento de Comercio publicado el jueves, el PIB creció a una tasa anualizada desestacionalizada del 4,9% en el tercer trimestre. La cifra supone una mejora significativa respecto al segundo trimestre, cuando el crecimiento fue del 2,1%. Las expectativas de los economistas se vieron ligeramente superadas, ya que una encuesta de Dow Jones apuntaba a un crecimiento esperado del PIB del 4,7%.
El fuerte crecimiento se vio favorecido principalmente por el gasto de los consumidores, las existencias, las exportaciones, la inversión residencial y el gasto público. Jeffrey Roach, economista jefe de LPL Financial, comentó al respecto: "La verdadera pregunta es si esta tendencia puede continuar en los próximos trimestres, y creemos que no".
Aunque el informe podría dar a la Reserva Federal cierto impulso para mantener una política restrictiva, los operadores siguen sin valorar la posibilidad de una subida de los tipos de interés en la reunión del banco central de la próxima semana, según los datos de CME Group. Tras la publicación del PIB, los precios de los futuros apuntaban a una probabilidad de subida del 27% en la reunión de diciembre.
Matthew Ryan, jefe de estrategia de mercado de Ebury, señala: "Lo esencial para la Reserva Federal es que no hay recesión a la vista y los responsables políticos pueden estar contentos sabiendo que pueden mantener los tipos de interés más altos durante más tiempo sin provocar un colapso de la economía estadounidense".
Sin embargo, a pesar de la evolución positiva, hay preocupación por el futuro. El aumento del precio del gas y las tensiones geopolíticas podrían plantear retos al crecimiento económico en los próximos meses. En general, la economía estadounidense mostró fortaleza en el tercer trimestre, pero muchos esperan que el crecimiento se ralentice en los próximos periodos.
Esta semana, a pesar de los buenos resultados de las grandes empresas, hemos visto descender los mercados debido a importantes desinversiones. $^GSPC $^NDX $^DJI
Y vosotros amigos inversores, ¿qué esperáis con lentitud para la semana que viene? 😊