Bristol-Myers: un gran avance en el tratamiento del cáncer y un futuro prometedor
Bristol-Myers Squibb es una empresa farmacéutica estadounidense con una sólida posición en inmunología y oncología. Desde hace más de 160 años, la empresa produce medicamentos innovadores que ayudan a personas de todo el mundo a combatir el cáncer, las cardiopatías y otras enfermedades graves. Pero, ¿cómo está la empresa en cifras?

Bristol-Myers Squibb Company $BMY es una empresa farmacéutica estadounidense fundada en 1858. Es líder mundial en la fabricación de medicamentos innovadores y productos biológicos. Sus principales áreas de actividad son la oncología, la hematología, la inmunología y la salud cardiovascular.
Entre sus productos más conocidos figuran los anticancerosos Opdivo y Yervoy, los anticoagulantes Coumadin y Eliquis, y los antihipertensivos Monopril y Plavix.
$BMY tiene varias ventajas competitivas. Es líder en inmunoterapia, sobre todo en el tratamiento del melanoma y el cáncer de riñón. Cuenta con una protección de patentes muy sólida en sus medicamentos y productos biológicos clave, lo que le proporciona mayores márgenes de beneficio.
La empresa también lleva a cabo una intensa labor de investigación y desarrollo, que ha dado lugar a una amplia cartera de productos innovadores en diversas fases de ensayo clínico. BMY opera a escala mundial y más de la mitad de sus ingresos proceden de EE.UU., mientras que el resto procede principalmente de Europa y los mercados emergentes.
Los principales riesgos para BMY son la fuerte competencia en el sector, sobre todo en oncología. Al mismo tiempo, la fuerte dependencia de unos pocos productos clave aumenta el riesgo del impacto de la pérdida de protección de patentes. Otro riesgo puede ser el entorno normativo en EE.UU. y en el extranjero, en constante cambio, que presenta incertidumbre en cuanto a la aprobación y reembolso de nuevos medicamentos.
Sin embargo, BMY tiene un gran potencial de futuro, con una amplia cartera de medicamentos en desarrollo clínico en áreas terapéuticas prometedoras. Si consigue lanzar nuevos fármacos, puede reforzar considerablemente su posición en el sector, sobre todo en inmunoterapia.
¿Dónde está el potencial de futuro?
La fusión con Celgene, completada en 2019, permitirá a la empresa centrarse aún más en la biotecnología innovadora. Esto podría generar mayores beneficios y valorar la inversión de los accionistas en el futuro.
De cara al futuro, también espero que Bristol-Myers Squibb siga creciendo y reforzando su posición en el mercado. Veo las siguientes áreas clave de progreso:
-Desarrollo deinmunoterapia y tratamientos contra el cáncer. BMY es líder en inmuno-oncología, un campo con enorme potencial. El lanzamiento con éxito de nuevas inmunoterapias puede aumentar significativamente las ventas y los beneficios en los próximos años.
-Inversión en candidatos prometedores en fases avanzadas de desarrollo. BMY cuenta con decenas de moléculas prometedoras en fase de desarrollo clínico para diversos tipos de cáncer y otras enfermedades. La introducción con éxito de algunas de ellas en el mercado impulsaría el crecimiento.
-Fortalecer su posición en otras áreas terapéuticas atractivas, como las enfermedades cardiovasculares y el VIH. BMY tiene potencial para ampliar su cartera de medicamentos e ingresos en estas prometedoras áreas.
-Adquirir empresas más pequeñas con tecnologías innovadoras. BMY dispone de liquidez y solidez financiera para reforzar su cartera mediante adquisiciones de empresas biotecnológicas prometedoras. Esto le ayudaría a seguir el ritmo de sus competidores.
-Mantener unos resultados financieros estables y aumentar el valor para el accionista. Espero que BMY siga generando sólidos flujos de caja, aumente los dividendos y valore las inversiones de los accionistas.
Finanzas
Los ingresos de BMY han crecido en los últimos años, alcanzando la cifra récord de 46.200 millones de dólares en 2022. Las principales fuentes de crecimiento fueron Opdivo, Eliquis e indicasquolano. El fuerte crecimiento de los ingresos refleja el éxito del lanzamiento de medicamentos innovadores y la expansión a nuevas áreas terapéuticas como la inmunología.
Los costes de ventas crecieron más lentamente que los ingresos, lo que se reflejó positivamente en la mejora del margen bruto. Los gastos de explotación se mantuvieron relativamente estables, aunque aumentaron ligeramente en 2021 debido a las inversiones en investigación y ventas. La empresa generó así un fuerte flujo de caja operativo, que le permitió invertir en crecimiento futuro y aumentar al mismo tiempo los dividendos a los accionistas.
Tanto el beneficio antes de impuestos como el beneficio neto crecieron, excepto en 2020, cuando se vieron afectados negativamente por la amortización de activos intangibles y los costes de reestructuración.
BMY también goza de una posición financiera estable, con una amplia tesorería y un bajo endeudamiento. El flujo de caja de las operaciones supera las necesidades de capital, lo que permite a la empresa aumentar el gasto en investigación, desarrollo y adquisiciones. El elevado flujo de caja operativo y las reservas de efectivo proporcionan los medios para hacer frente a posibles problemas futuros.
Los resultados financieros demuestran que BMY es una empresa sólida y rentable con amplias posibilidades de crecimiento. Las áreas clave para la expansión futura son la oncología, la inmunidad y las enfermedades inflamatorias.
Flujo de caja
El flujo de caja de las operaciones de BMY ha crecido en el último año, alcanzando los 13.100 millones de dólares en los últimos 12 meses. La tesorería de explotación proporciona a la empresa efectivo libre para invertir en crecimiento futuro, amortizar deuda y aumentar los dividendos.
El flujo de caja de las actividades de inversión es negativo, ya que BMY invierte regularmente en la adquisición de activos intangibles y tangibles. Los gastos de capital han rondado los 1.000 millones de dólares anuales en los últimos años.
Los flujos de caja de las actividades de financiación también han sido negativos en los últimos años, ya que la empresa amortiza deuda y paga dividendos a los accionistas. En 2022, la empresa amortizó 11.400 millones de dólares de deuda y pagó 8.000 millones para recomprar sus propias acciones.
El flujo de caja libre, o efectivo operativo menos gastos de capital, fue de casi 12.000 millones de dólares en el año más reciente. Esto demuestra que la empresa está generando suficiente efectivo para cubrir las necesidades de capital, amortizar deuda y aumentar los pagos a los accionistas. La solidez del flujo de caja operativo es la base de la solidez y estabilidad financiera de la empresa.
Por lo tanto, si los lanzamientos de nuevos fármacos tienen éxito, cabe esperar un mayor fortalecimiento del flujo de caja operativo en el futuro. Esto debería permitir a BMY aumentar los dividendos a los accionistas y financiar futuras adquisiciones o inversiones estratégicas con sus propios recursos.
BMS tiene actualmente una capitalización bursátil de 148.000 millones de USD. Las acciones de la empresa cotizan a una relación precio/beneficio (PER) de 8,59, inferior a la del índice S&P 500 (23,79). Esto sugiere que las acciones de BMS están relativamente infravaloradas en relación con el índice y la media del sector. La relación precio/ventas (P/V) de 3,21 también indica una valoración atractiva.
Laempresa ha repartido dividendos por un total de 2,28 dólares por acción en el último año, lo que supone una rentabilidad por dividendo del 3,25%. BMY lleva mucho tiempo aumentando el reparto de dividendos, por lo que la rentabilidad por dividendo es muy atractiva para los inversores.
La mayoría de las acciones de BMY son propiedad de inversores institucionales (79,4%), con una baja proporción de personas con información privilegiada (0,07%), lo que demuestra la confianza de los inversores profesionales en la empresa y el potencial de crecimiento del valor.
La empresa muestra unos resultados operativos sólidos y crecientes. En los últimos 5 años, las ventas han crecido una media del 17,3% anual y el beneficio neto una media del 4,5% anual. El margen de explotación es elevado (21,5%) y el margen neto es del 13,7%. El rendimiento de la inversión (11,8 %) y el rendimiento de los fondos propios (19,8 %) también son sólidos, por lo que los indicadores financieros de la empresa son ciertamente muy sólidos.
Basándose en el análisis fundamental y la valoración, las acciones de BMY parecen ser una atractiva oportunidad de inversión. La empresa es líder en áreas terapéuticas prometedoras, tiene una amplia cartera de productos, unos resultados financieros sólidos y unas perspectivas de futuro estables.
Expectativas de los analistas

Los 19 analistas que ofrecen previsiones de precios a 12 meses para Bristol-Myers Squibb Co tienen un objetivo medio de 81,00, con una estimación alta de 92,00 y una estimación baja de 62,00. La estimación mediana representa un aumento del +15,34% desde el último precio de 70,23.
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Ten en cuenta que esto no es un servicio de asesoramiento financiero. Toda inversión debe pasar por un análisis exhaustivo.