Elon Musk demandado por estafa piramidal, Tesla y SpaceX en problemas
El multimillonario está bajo presión legal por su papel en animar al público a comprar dogecoin $DOGEUSD, que ahora está un 92% por debajo de su máximo histórico. El multimillonario y sus empresas han sido demandados por 258.000 millones de dólares por participar en el llamado "juego de las criptopirámides" a través de una moneda meme.
Elon Musk, junto con Tesla y SpaceX, se enfrentan a un caso colosal.
Según informa el New York Post, la demanda federal fue presentada en el bajo Manhattan por el fiscal Keith Johnson. Nombró a Musk, a su empresa de automóviles y a una empresa de exploración espacial en los documentos de la demanda.
Johnson solicita al CEO 86.000 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios y 172.000 millones por las pérdidas sufridas en el comercio de dogecoins desde 2019. Pretende representar a quienes perdieron dinero comerciando con meme-coins tras el ascenso de Musk -que también exige que éste deje de hacerlo-.
Dogecoin fue desarrollado por sus cocreadores Billy Markus y Jackson Palmer a finales de 2013 en cuestión de horas. Los socios ni siquiera estaban demasiado interesados en la tecnología blockchain, sino que lanzaron la criptomoneda simplemente como una sátira de las otras criptomonedas inútiles que se estaban creando en ese momento.
Irónicamente, dogecoin es una de las pocas monedas que han sobrevivido desde entonces, gracias al poder de su meme. Un informe de Grayscale del año pasado descubrió que en realidad es una criptomoneda más reconocida que Ethereum.
Elon Musk, en particular, ha contribuido a su popularidad, y comenzó a retuitear a millones de sus seguidores de Twitter sobre ella a principios de 2021.
Desde entonces, ha perdido prácticamente todo su valor, pero ha caído más de un 90%, desde los 0,73 dólares de su máximo hasta los 0,05 dólares actuales. Como explica la demanda, Doge no tiene "ninguna utilidad única" en comparación con otras criptodivisas, ni ningún metal precioso o interés que respalde su valor.
"Se trata simplemente de una estafa en la que se engaña a los 'tontos mayores' para que compren la moneda a un precio mayor", dice.
La influencia de Elon Musk en el precio de la dogecoin sigue prevaleciendo. La moneda causó sensación cuando anunció el mes pasado que SpaceX la aceptaría para pagar sus productos, así como cuando empezó a ultimar su oferta para comprar Twitter.
El multimillonario anunció en marzo que no tenía planes de vender ninguno de sus bitcoins, Ethereum o dogecoins a pesar del mercado bajista, que también atrajo a los inversores relacionados con el dogecoin.